Lipotransferencia Asistida

La lipotransferencia asistida por agua utiliza grasa del propio paciente como relleno. Ofrece la posibilidad real de dar volumen en forma segura.

Hasta ahora, para aumentar el tamaño de pechos y glúteos se empleaban en la Argentina dos técnicas: la colocación de prótesis y el relleno con grasa, también utilizado para corregir arrugas y depresiones que dejan ciertas enfermedades o accidentes. No obstante, a mediados del año pasado se sumó otra alternativa: la lipotransferencia asistida por agua, un método de avanzada que permite la aplicación de grasa de mejor calidad y del propio paciente.

El Dr. Guillermo A. Cienfuegos, médico especialista en cirugía plástica y reparadora y Co-director del Centro Cirugia Laser en Córdoba, señaló que “lo interesante de esta técnica es que se utiliza el tejido graso autólogo (propio) en el mismo paciente tanto a nivel de reconstrucción como estético”.

Por otra parte, las novedades de este tipo de lipotransferencia es la asistencia de agua (solución fisiológica y anestésicos) en el proceso. Durante todo el ciclo de extracción se va mezclando el suero con la grasa, inclusive cuando se aspira. Es por ello que la manipulación que se produce es mínima, con mucha menor destrucción de tejido graso.

La técnica anterior, implicaba mucha manipulación del tejido graso. Con esta técnica todo lo que se recoge va a un frasco estéril, donde se filtra la grasa y se deposita en el fondo. Ya filtrada, está lista para ser recogida mediante jeringas estériles con cánulas especiales y listas para inyectar.

Por otra parte, con los métodos anteriores se comprobó una reabsorción bastante importante de lo implantado. Esta es una de las desventajas que se intentó subsanar con la lipotransferencia asistida por agua. En la actualidad con este método se busca que haya menor cantidad de reabsorción al poder inyectar grasa de mejor calidad.

El lugar del cuerpo recomendado para la extracción: Se puede sacar de cualquier sector de donde a uno le sobre tejido adiposo. Fundamentalmente las regiones más utilizadas son la parte abdominal, que produciría una mejor calidad de grasa, y los muslos (por lo general la mujer tiene una mayor tendencia al cúmulo en ese sector).

En tanto, la utilización de este tejido graso es variada, ya que sirve tanto para reparar depresiones como para fines pura y exclusivamente estéticos.

Este método fue desarrollado en Alemania. Allí empezó a utilizarse fundamentalmente en los casos en los que se hacían resecciones oncológicas menores de mama. Cuando se hacen resecciones esos sectores quedan deprimidos, y una forma bastante simple de arreglarlos -cuando ya todo eso está bien chequeado por el especialista- es inyectando grasa.

Luego, con el tiempo, comenzó a implementarse en cirugías de belleza. Algunas de las aplicaciones más frecuentes hoy a nivel facial son: dar volumen y relleno a depresiones generadas por accidentes o enfermedades -como es el caso de la esclerodermia-, en atrofias faciales y en arrugas muy profundas. A nivel corporal se utiliza para la reconstrucción de mamas o el aumento mamario sin prótesis, y también en la zona de los glúteos.

En ese sentido, la lipotransferencia asistida por agua no se opone de ninguna manera a la aplicación de prótesis, e incluso hace algunos años que se usa de manera paralela para mejorar los resultados. Son dos cosas diferentes. Por ejemplo, la nueva técnica podría estar indicada para el paciente que tiene aversión de colocarse algo en su cuerpo. Esto es lo que se está en este momento desarrollando.

La lipotransferencia ofrece la posibilidad real de dar volumen y relleno en forma segura, frente a otros tratamientos hoy demostrados casi como peligrosos. Ahora contamos con un instrumental de precisión para la recolección de tejido graso y su aplicación. El nuevo equipamiento es muy importante y siempre esperamos resultados excelentes.